Los auxiliares forman parte de los equipos de asistencia inmediata a los neonatos en el momento del parto. Probablemente, una de sus principales tareas consisten en la administración de vitamina K por vía inyectable a los niños a pocos instantes de haber nacido. (claro que si son de menos de 2000 kg, y prematuros, se evita su aplicación hasta que no estén en un peso óptimo)
La vitamina K es un componente fundamental de la cascada de la coagulación y parte de su origen se debe a la acción de la microflora intestinal. Dado que los neonatos carecen de bacterias en el intestino, los niños recién nacidos tienen cierta disminución en su capacidad para coagular en los primeros 3 días de vida, que tiende a corregirse de modo espontáneo en la primera semana de vida.
La aplicación intramuscular en el cuadríceps de los recién nacidos de un miligramo de este producto permite optimizar la coagulación de los neonatos en este período de carencia relativa, evitando numerosas complicaciones hemorrágicas a predominio cerebral e intestinal. Esta estrategia se lleva a cabo en forma precoz por parte de los auxiliares de enfermería, convirtiéndose así en uno de sus principales objetivos en el equipo de Neonatología de los hospitales. Debe recordarse que, en general, se efectúa también en ese momento la aplicación de la primera dosis de la vacuna de la hepatitis B.
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